Si eres uno de esos lectores manitas, te traemos toda la inromación que necesitas si quieres cambiar el radiador del coche (uno de los elementos claves del sistema de refrigeración del coche) y ahorrarte algo de dinero en el taller. Si sigues estos pasos al pie de la letra, el resultado será satisfactorio.
Antes que nada, debes asegurarte de que cuentas con las herramientas necesarias para poder llevar a cabo la tarea. Necesitarás:
- Un juego de carraca o llaves fijas para poder extraer los tornillos que encuentres.
- Unos alicates anchos y de punta algo larga para aquellas abrazaderas que no tengan tornillo
- Un gato para elevar el vehículo (con el que viene por defecto en el coche es suficiente).
- Una garrafa de anticongelante (puede que necesites dos, según la capacidad del circuito de tu coche)
- Un cubo para recoger el anticongelante que está en el circuito interno.
- Un embudo para introducir el líquido (aunque si tienes buen pulso, no es imprescindible).
Paso 1. Retirar los plásticos que cubren el radiador
Lo primero que hay que hacer, es echar un vistazo a la situación a la que te enfrentas. Debes localizar todos los tornillos que sujetan el radiador, así como los plásticos que lo cubren, ya que es necesario retirarlos para poder cambiarlo. El primer paso consiste en extraer estos plásticos. Hay veces en las que puede ser una tarea complicada, pero es mejor retirar todos los que podamos, ya que, aunque parezca que alguno no va a molestar, justo ese puede ser el causante de que el radiador no salga cuando tengas todo listo.
Paso 2: Qué hacer con el ventilador

Dependiendo de si tu motor lleva un ventilador viscoso o uno eléctrico, actuarás de una manera u otra:
- Ventilador de tipo viscoso: Va atornillado al motor mediante una polea y que no está en contacto con el ventilador. En este caso, tan solo tendrás que retirar el plástico que hemos dicho antes. Es probable que el poco espacio entre el ventilador y radiador no te permita extraer dicho plástico. No te preocupes, tan solo déjalo apartado para que no moleste. En el momento de sacar el radiador debería salir sin problemas.
- Ventilador eléctrico: Va atornillado al radiador… y entonces tienes dos opciones. La primera, es desconectar el cable del ventilador, desatornillarlo de sus soportes y sacarlo. La otra opción, más sencilla, es dejarlo anclado al radiador y retirar solamente el cableado que tenga. Todo depende del espacio de maniobra que tengas, aunque por regla general, lo mejor es dejar el ventilador en el radiador y sacarlo todo junto.